Si ya estás ahorrando parte de tus ingresos, debes pasar a la siguiente etapa y prepararte para invertir, haciendo trabajar tu dinero por ti. ¿Estás en camino de convertirte en inversor?
“El ahorro es la base de la fortuna” plantea el dicho. Sin embargo, si en tiempos de inflación y aumentos de precios el dinero que no se gasta se guarda sin tomar previsiones, va perdiendo su valor y difícilmente te permita llegar a ninguna fortuna. Aun con una inflación mínima como puede haber en los países con mayor estabilidad económica, es poca la reserva de valor que se puede hacer separando billetes o monedas.
Por eso, si estás comenzando a ahorrar y quieres llegar lejos, debes asegurarte de pasar al siguiente escalón financiero y prepararte para convertirte en inversor de forma de lograr no sólo cuidar tus ahorros sino hacerlos crecer.
¿Cuál es la diferencia entre ahorrar e invertir? Mientras que ahorrar es simplemente gastar menos de lo que ganas y separar ese sobrante para el futuro, el concepto de inversión va más allá: invertir es convertir los ahorros en activos que generen mayores rendimientos. Es decir, al invertir no sólo se preserva el valor del dinero, sino que con un poco de técnica y previsión es posible hacer que el dinero aumente de valor. ¿Cómo? Haciendo que los activos que compras con los ahorros trabajen para ti. Si compras un departamento y lo alquilas, recibes una renta; si colocas tu dinero en plazos fijos recibes intereses; si inviertes en acciones éstas pueden venderse más caras si a la empresa elegida le va bien.Monto inicial | ¿Cómo lo reservo para el futuro? | Monto un año después | Resultado |
$100 | Ahorro en efectivo | $100 | El dinero vale menos (aun con una inflación baja pierde poder de compra con el paso del tiempo) |
$100 | Ahorro con preservación de valor (ej. caja de ahorro o moneda fuerte) | $110 | El dinero mantiene el poder de compra que tenía en el momento inicial |
$100 | Inversión (ej. acciones o inmuebles) | $200 | El dinero creció junto con el valor o renta del activo |
En definitiva, al invertir se utiliza el dinero ahorrado con un fin temporario (que puede ser de unos pocos días o de muchos años) y, en compensación, el inversor tiene la expectativa de recibir un beneficio monetario y de esta forma, nuevos ingresos que no dependen en forma directa de su trabajo.
Los activos en los que invertir el dinero ahorrado pueden ser reales o financieros. Cuando inviertes en activos físicos o reales esperas que te den una renta o que aumenten de valor con el pasodel tiempo (por ejemplo, terrenos, joyas, oro). Cuando inviertes en activos financieros intervienes en un mercado donde algunas instituciones, por lo general los bancos, toman el dinero a cambio de una rentabilidad o interés, que depende del tipo de instrumento (plazos fijos, fondos de inversión, acciones, bonos, entre otros).
Claro que en la fórmula para una buena inversión el riesgo es uno de los componentes principales. Nadie sabe con exactitud lo que ocurrirá en el futuro y, por lo tanto, los activos en los que se invirtió pueden no crecer, no tener la renta esperada o incluso llegar a perder totalmente su valor.
Por ello es importante que antes de invertir te informes, y selecciones el instrumento que mejor se adecua a tus objetivos, los montos de dinero de que dispones, el tiempo en que esperas conservar la inversión y el nivel de riesgo que estás dispuesto a aceptar.
Pon tu dinero a trabajar por ti. Con buenas inversiones es posible preservar y aumentar el valor de tus ahorros.
Deja una respuesta