Los ingresos de la mayoría de las personas dependen de su capacidad para trabajar. ¿Cómo garantizar el mantenimiento propio y de la familia ante eventuales riesgos para la vida o la salud?
Mediante el pago de pequeñas cuotas (prima), los seguros garantizan un resarcimiento económico ante eventualidades como robos, accidentes o enfermedades.
Una de las principales preocupaciones para la mayoría de las personas, sobre todo quienes tienen hijos pequeños, es cómo se sustentaría su familia si ellos mueren o quedan incapacitados para trabajar ante alguna contingencia, imposible de prever con certeza.Así surgieron los seguros de vida, para proteger a esposos, hijos u otros beneficiarios, otorgándoles una indemnización en caso de fallecimiento del titular de la póliza. De esta forma, con pagos relativamente chicos es posible garantizar el nivel de vida de los seres queridos ante esta situación irreversible, si se los identifica como los beneficiarios del seguro.
Como extensión de estos seguros se crearon pólizas que no sólo ofrecen cobertura ante muerte, sino también ante riesgos de menor gravedad como enfermedades, accidentes o discapacidad temporal o permanente. Distintas opciones cubren el pago de los gastos médicos, la internación y los ingresos perdidos durante los períodos afectados.
Existen también los llamados seguros de supervivencia que funcionan como un seguro de ahorro y que suelen estar combinados con un seguro de vida. Si la persona muere, sus beneficiarios reciben el dinero, pero si el tomador alcanza determinada edad tiene la posibilidad de cobrar la suma de dinero estipulada y así poder utilizarla para los gastos de su vejez.
Si estás pensando en contratar un seguro de vida ten presente la siguiente información:
- Aunque pueda resultar un tema difícil, la prevención que brinda un seguro de vida permite garantizar el futuro de los seres queridos y que puedan superar las dificultades sin preocuparse por temas económicos. No te demores en evaluar tus opciones.
- Averigua con tu empleador si no tienes ya una póliza a tu nombre, ya que en algunos países existe un seguro de vida obligatorio para el personal.
- Cuanto más joven saques el seguro, más económico resultará ya que las compañías calculan que la posibilidad de muerte es menor y el tiempo de pago mayor. Algunas compañías no emiten pólizas a mayores de cierta edad.
- Los seguros no cubren situaciones como suicidio, enfermedades preexistentes o desaparición. Consulta los detalles y exclusiones con tu asesor.
- Los montos máximos de las indemnizaciones se relacionan con la cantidad de familiares a cargo, los ingresos habituales del asegurado y el pago de la prima o cuotas del seguro.
- Los seguros de vida implican una relación de largo plazo; tómalo con una compañía confiable y con trayectoria.
- Analiza el impacto de la cuota del seguro en tus finanzas personales, para que no agregue costos excesivos.
- Mantén la póliza y la documentación de pago ordenada y al día.
- Deja a alguien a cargo de los trámites o informa al beneficiario, para que sepa qué hacer en caso de tu ausencia.
Ante una situación irreversible, los seguros de vida permiten garantizar el ingreso a los familiares supervivientes.
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